27 de septiembre de 2006

TODOS SOMOS OCUPAS

27 de Septiembre de 2006 DECLARACION PUBLICA

1.- El gobierno, como en los peores años de la Dictadura, a altas horas de la noche de ayer, allanó las casas - locales y “ocupas” para detener e interrogar a activistas de izquierda que allí moraban. Como en los más negros años de la dictadura se procedió a mostrar como un delito la tenencia de volantes, material de propaganda política lienzos y una serie de botellas que se mostraron como si fueran insumo de bombas molotov. Sin embargo, luego la fiscal a cargo del caso explicó con soberbia que se les detuvo por el supuesto delito de ser “antisistémicos”. 2.- Por la gravedad de los hechos expresamos nuestro repudio por esta acción que impulsa el gobierno en contra de las organizaciones de izquierda, en especial las organizaciones anarquistas y de ocupas. Reconocemos en esta maniobra represivo judicial un intento de justificar frente a la opinión pública la política represiva del gobierno frente a las organizaciones y demandas sociales en especial en estos momentos frente a los trabajadores de la salud a los que se les reprime y despide por defender sus demandas y hacer uso de su legítimo derecho al paro y la protesta social. 3.- Ratificamos nuestra posición de que no habrá salida a las demandas sociales sin un cambio profundo en el país que ponga fin al régimen antidemocrático y pro empresarial que pactó la Concertación con Pinochet y la Alianza. Por eso exigimos una Asamblea Constituyente y luchamos por un gobierno de los trabajadores y el pueblo. Es decir, reconocemos frente al país y la Fiscal pinochetista que nosotros también somos antisistémicos de este régimen reaccionario que ella defiende. 4.- El gobierno ha intentado ligar, sin mostrar prueba alguna, estos allanamientos y detenciones con la bomba molotov en la Moneda. Aquí es donde el cinismo del gobierno no tiene límite. Se escandaliza por una bomba molotov mientras mantiene libre y sin siquiera prontuariar a pesar de los múltiples delitos de que se le acusa a quien es responsable de arrojar toneladas de bombas sobre la Moneda. Ese ladrón y asesino sigue suelto con la total complicidad del gobierno, la fiscal a cargo del caso y todo el poder judicial. 5.- Nuestra diferencia con aquellos que en cada movilización buscan el enfrentamiento con las fuerzas represivas es de orden práctico y táctico. En vez de ayudar muchas veces perjudican la movilización. En las marchas del once de septiembre de los últimos años eso es lo que ha sucedido y también sucedió con esa molotov en la Moneda cuyas consecuencias prácticas fueron ampliadas hasta el absurdo por los medios de comunicación, el gobierno y la dirección del PC. Nuestra diferencias con la represión con el Gobierno, en cambio, es de fondo. Su represión la ejerce para perpetuar la impunidad y los privilegios de una minoría de grandes empresarios y militares intocables. 6.- Por todo lo anterior exigimos libertad inmediata y sin procesamiento alguno a todos los detenidos y la restitución de todos sus bienes e inmuebles que “ocupan”. Son lugares públicos y muchos de ellos abandonados. Exigimos el fin de la represión. En especial que se terminen los despidos y queden sin efecto todos que ya se han anunciado en el sector salud. Que termine la persecución a los estudiantes movilizados y sumariados por participar en movilizaciones o en actividades artísticas como sucede con los estudiantes de la U. Católica castigados por el sólo echo de escandalizar a la reaccionaria jerarquía de la Iglesia. Exigimos el fin de las leyes introducidas por la Concertación para criminalizar la lucha social y sus distintas formas de legítima expresión. Por ultimo hacemos un llamado a todas las organizaciones de izquierda, democráticas, sindicales y sociales a que juntos nos sumemos en el repudio a esta maniobra represiva de un gobierno incapaz.

14 de septiembre de 2006

Un sargento del ejército norteamericano puede ser juzgado por una corte marcial por dudar de la versión oficial sobre el 11 de septiembre

El sargento del ejército norteamericano Donald Buswell corre el riesgo de ser degradado y juzgado por una corte marcial debido a la redacción de mensajes «desleales». Sin embargo, en la guerra de Irak, el sargento Buswell fue herido por lo que recibió la Purple Heart, prestigiosa condecoración militar (foto: entrega de la medalla). Desde entonces era analista militar en Fort Sam Houston, en Texas. ¿Su delito? Haber enviado un e-mail en el que se interrogaba acerca de la versión oficial sobre los atentados del 11 de septiembre de 2001. En una respuesta a un spam relacionado con el 11 de septiembre, el sargento Buswell cuestionó la versión oficial acerca del atentado contra el Pentágono y de lo que sucedió con el Vuelo 93 que se estrelló en Pennsylvania. Consideraba necesario pedir la creación de una nueva comisión investigadora independiente dispuesta a examinar todas las opciones posibles sobre los acontecimientos de aquel día. Al día siguiente, Donald Buswell descubría que ya no tenía acceso a su oficina y que se le había iniciado una investigación. Interrogado sobre este aspecto por la revista en línea Iconoclast Online, el coronel Green y le mayor Escobar, quienes iniciaron el procedimiento disciplinario, no comentaron su decisión.

En el correo enviado por el sargento Buswell no se mencionaba ningún tipo de complicidad por parte del ejército norteamericano en los atentados. Sin embargo, la simple mención de dudas sobre la versión oficial de los atentados del 11 de septiembre se ve hoy como traición e incluso la presentación de los fracasos de la Coalición en Irak se considera antipatriótica. Así, el 29 de agosto de 2006, Donald Rumsfeld criticó a la prensa estadounidense sin embargo acostumbrada a la autocensura, considerada demasiado derrotista.

(Cedric Housez Especialista francés en comunicación política).