18 de octubre de 2007

Tercera semana de huelga EL SIGLO

(www.generacion80.cl) Entrada la tercera semana de huelga legal, los trabajadores de El Siglo paralizados seguimos esperando una respuesta a nuestras demandas por parte de la empresa. Pero en esta espera no hemos estado solos.

Agradecemos el permanente apoyo que hemos recibido en nuestro piquete de huelga, frente a Diagonal Paraguay 458, de representantes de diferentes sectores sindicales, sociales y políticos, y especialmente el brindado por gran parte de la base militante del Partido Comunista que, tras acercarse a nosotros para conocer de primera mano los hechos, nos ha manifestado su solidaridad. Palabras de apoyo y resistencia también hemos recibido de la dirigente estudiantil Maria Jesús Sanhueza y del dirigente poblacional Lautaro Guanca, con quienes sostuvimos una hermosa, dilatada y profunda conversación frente al que fuera nuestro lugar de trabajo. Recibimos el apoyo de una delegación de la organización de deudores Andha Chile a Luchar, encabezada por su dirigentes Iván Carrasco y Juana Silva, también de dirigentes del otro sector de Andha Chile, del presidente del Sindicato de Trabajadores de PATROLL José Cortés Bahamondes y de Miguel Avalos, del Comité de Defensa del Cobre.
Asimismo, agradecemos la asistencia al acto que realizamos en el Teatro Camilo Henríquez, el viernes 12, donde llegaron dirigentes sociales, políticos y sindicales de larga trayectoria y con una importante base sindical que los respalda, entre ellos integrantes de la CEPCH, de la CGT y de la CUT. Agradecemos especialmente, el aporte en alimentos no perecibles entregado por Manuel Ahumada Lillo a nombre de la CGT, así como el "plotter" obsequiado por el Sindicato de Trabajadores de la Asociación Chilena de Seguridad y el papelógrafo de apoyo que instalaron en el teatro los representantes de Radio Primero de Mayo de PAC.
No podemos dejar de agradecer profundamente el trabajo artístico ofrecido por el grupo de rock Los Pipeños y al trovador José Cerpa acompañando un acto lleno de saludos y de palabras de apoyo. Nosotros seguiremos en Diagonal Paraguay 458. Para quienes se perdieron este acto, estamos preparando otros en los que recoger el aliento fraterno y el apoyo material que requeriremos para seguir resistiendo.
Estamos seguros de que tenemos de nuestro lado la razón y la dignidad de estar defendiendo nuestros derechos y los derechos de todos los trabajadores. Si no exigimos consecuencia a estos patrones ¿a quién se le puede pedir?
El discurso del Sindicato
Junto con los saludos de Angélica Carballo, presidenta de la CEPCH, y de Manuel Ahumada, presidente de la CGT, el acto solidario contó con la intervención del presidente del Sindicato de Trabajadores de la Editorial Siglo XXI (El Siglo), Julio Oliva García, quien comenzó agradeciendo "la solidaridad demostrada en todo el proceso que nos ha tocado vivir desde la conformación de nuestro sindicato hasta estos días en que llevamos adelante la huelga legal" para luego continuar con el relato de los acontecimientos.
"Vuestro apoyo y el acercamiento de mucha gente a preguntar por los orígenes del problema toman una importancia vital en el momento en que, los dueños de El Siglo, pretenden imponer una versión antojadiza y tergiversada de los hechos. Hemos debido salir al paso de mentiras y calumnias, como las que señalan que estamos pidiendo 17 millones de pesos para cada uno de nosotros, que pretendemos hacerle "un gallito" a la dirección del Partido Comunista o ejercer una suerte de codirección del semanario. Nada más lejano a la realidad.
Para explicar esto les pediré unos minutos de paciencia. Este equipo, en promedio con más de 10 años trabajando en El Siglo, fue parte del colectivo que discutió y elaboró un proyecto que cambiaba profundamente el sentido que se le daba al semanario. Recordarán el cambio de portada de dos a cuatro colores, minuto en que comienza a hacerse realidad la idea de que el periódico fuese el órgano del Partido Comunista, que tendría la editorial y columnas de opinión donde se expresaría la política del Partido, como también reportajes y crónicas que mostrarían como esa línea se desarrollaba, pero que además se abriría como un espacio para todo el mundo antineoliberal, para toda la izquierda y el mundo social y sindical que despertaba a la lucha. Símbolo de todo ello fue una nueva diagramación, secciones más cortas y más informativas, columnas de opinión diversas y, especialmente, la aparición en nuestra portada de la Margarita –tan recordada de tiempos del Fortín Mapocho- con su fina y aguda mirada crítica del acontecer nacional.
Este proceso tiene un abrupto cambio con la llegada como director de Francisco Herreros. La primera muestra fue la desaparición de Margarita de la portada, pero eso llegó acompañado de muchas otras cosas, como el fin del trabajo colectivo, la imposición de pautas y el enrarecimiento del ambiente laboral. Quienes pudimos hacer ver esto, solicitamos insistentemente entregar nuestras opiniones a los dueños del periódico, pero nunca sucedió. Lo que pasaba en El Siglo o lo que la dirección del Partido opinaba, era llevado y traído solamente por el director. El mismo que señalaba que desarrollaría "su proyecto", que esto era "su desafío" y que El Siglo ahora funcionaría como una empresa. Otro hecho incalificable, es el que este equipo por años ha tenido una baja remuneración, que desde 2001 se mantiene estancada entre 130 mil y 280 mil pesos, tomando en cuenta que esto era un esfuerzo colectivo compartido, pero el director llega ganando hasta cinco veces más que el promedio de nuestros ingresos.
En medio de este ambiente se produjeron hechos como la censura a dirigentes sociales y políticos que estaban en la noticia, como pasó con la dirigente estudiantil María Jesús Sanhueza y el dirigente poblacional Lautaro Huanca, con ANDHA Chile y hasta con artistas de izquierda que eran vetados de salir en las páginas. Últimamente esto se amplió a la imposibilidad de entrevistar a personas como Don Roberto Garretón, junto al planteamiento de Asamblea Constituyente y nueva Constitución para Chile, o de tocar temas sobre la corrupción del gobierno y la concertación. Si señalan que hay diferencias políticas porque no nos parecían estas medidas, sí, es cierto: No nos parece que censurar sea bueno para un medio que lucha por la democracia y se proyecta a un sistema mucho más justo y solidario. Pero eso no fue obstáculo para seguir aportando y entregando nuestro trabajo.
Pero eso no sería todo, ante nuestra insistencia en querer reunirnos con los dueños del periódico para trasladarles nuestras preocupaciones, entre ellas la de la baja en las ventas producto de una inadecuada forma de mostrar nuestros temas en portada, por fin se nos dijo que el 9 de marzo (de este año) vendría una delegación de la dirección del PC a reunirse con los trabajadores de El Siglo. Sin embargo, a la hora señalada, solamente llegó el abogado Pedro Aravena para iniciar el despido de nuestros compañeros. Ante tal agresión, decidimos constituir nuestro sindicato. Logramos negociar una salida relativamente digna en los casos de Marco Díaz, de administración, y de Iván Valdes, quien fuera subdirector del medio y en ese minuto era el editor de Economía. Pero con Cristián Pavez, quien recibió públicamente los insultos del director, no hubo intención de los administradores por buscar una salida conversada, se le obligó a ir a tribunales y hoy la empresa está declarada en rebeldía en el proceso por no hacerse parte de él.
La situación se fue agravando y continuaron los ataques a diferentes miembros del sindicato. En abril llegó como subdirectora Dolores Cautivo, meteórica integrante del Comité Central del PC, quien comenzó ganando 150 mil pesos más que el promedio nuestro, acompañada de su novio, Claudio Valenzuela, que de a poco se instaló como reemplazante -sin contrato- de los despedidos. Junto con ello, usaron toda la implementación de El Siglo para su beneficio personal a través de los servicios de Uno Producciones, que realiza asesorías comunicacionales a organizaciones sindicales. A poco andar, la subdirectora señalaría que estábamos en "una guerra" y que nadie saldría ganando. Dicha "guerra" continuó con ataques personales, el desconocimiento del sindicato y de quien fue elegido presidente, argumentando que no trabajaba en El Siglo si no que solamente colaboraba esporádicamente –como si el editor general pudiese ir una vez al mes-, y se acentuó cuando presentamos nuestro proyecto de contrato colectivo, advertidos de que vendrían más despidos, como forma de tener fuero.
En medio del proceso de negociación se nos comunicó el despido a Raúl Blanchet, secretario del sindicato, y a mi. Sin embargo, la Inspección del Trabajo, que ha entregado sendas resoluciones reconociendo la legalidad del sindicato, determinó nuestra reincorporación. De esto fue avisada la empresa, a través del Administrador René Amigo, quien firmó el acuerdo. Volvimos a nuestros puestos de trabajo, pero desde esa fecha, 22 de agosto, no se ha vuelto a publicar los materiales que hemos entregado. Además, a Raúl Blanchet se le desarmó su estación de trabajo y su computador fue trasladado a Vicuña Mackenna 31, donde ya estaba funcionando la sección de diagramación y producción final del semanario. Antes de que expirara el plazo legal de negociación, los siete integrantes del sindicato fuimos trasladados a un cuarto de Carmen 340, donde no contábamos con los más mínimos elementos para realizar nuestro trabajo, como tampoco con alguna comunicación con nuestros jefes en evidente muestra de que no se nos daría trabajo.
Finalmente botamos la huelga y, de inmediato, solicitamos la mediación de la Inspección del Trabajo como forma de, al menos, sentarnos con algún representante de la empresa para iniciar un diálogo, el que se encuentra interrumpido unilateralmente desde que se conformó el sindicato. No se presentaron y, contactado telefónicamente el representante legal de Editorial Siglo XXI, Claudio De Negri, señaló que no reconocían la legalidad de lo obrado por la Dirección del Trabajo. Fueron multados ante la sorpresa de la mediadora que nos señaló que nunca una contraparte se había negado a presentarse.
Iniciamos la huelga el 2 de octubre y el día siguiente una fiscalizadora de la Inspección del Trabajo se hizo presente en Diagonal Paraguy 458, donde antes funcionaba el periódico y hoy estamos en huelga, allí no había nadie, tampoco se estaba haciendo el periódico en Carmen 340, nueva dirección comercial de la Editorial, por lo que nos pidió que la acompañáramos a Vicuña Mackenna 31, donde se realizaba otra práctica ilegal, la de usar rompehuelgas para desarrollar el trabajo de quienes habíamos iniciado este movimiento. No se le permitió la entrada al primer piso, donde estaban trabajando Dolores Cautivo, Claudio Valenzuela, Danae Prado Carmona, José Luis Córdova y el diagramador Sergio Vargas. Fue tratada groseramente y amenazada por dirigentes del Partido Comunista, lo que culminó con la negativa de estos a firmar el acta que levantó relatando la situación.
En fin, han sido muchas las torpezas cometidas por quienes dicen estar defendiendo El Siglo y han sido incapaces de abrir un espacio de diálogo para solucionar este conflicto.
Incluso se nos ha acusado de ser parte de una campaña anticomunista.
Aquí les pido hacer un paréntesis para contar algunos detalles de cada uno de los que conformamos el sindicato. Jorge Texier es un antiguo militante comunista y periodista de El Siglo, Vistazo, Radio Moscú y Principios. Integrante de la dirección clandestina en los tiempos en que muchos fueron hechos desaparecer y ex miembro del Comité Central del PC.
Jorge Zúñiga: Fotógrafo, militante comunista, imperdible en las manifestaciones sociales y políticas, como también bajo los palos y botas de los pacos.
Magdalena Muñoz (Mafalda): Militante comunista de antes de la Unidad Popular. El golpe la encuentra en la UTE, desde donde es sacada con decenas de estudiantes y funcionarios –entre ellos Víctor Jara- hacia el Estadio Chile. Vivió su exilio en Argentina y regreso a la lucha clandestina. Es desde hace muchos años la secretaria del semanario.
Eliana Gómez: Militante comunista en Quilicura desde hace años. Forma parte del equipo de venta de suscripciones y es la única, de cuatro, que continuó su labor pese a la baja de las ventas y el magro ingreso.
Ana Muga: Editora de Cultura, aunque también toma otro temas. No es militante comunista, pero es "militante" de El Siglo a toda prueba, con un compromiso probado por años.
Raúl Blanchet: Militante comunista desde antes de la UP, perseguido tras el golpe sale fuera del país, pero en cuanto puede vuelve desde Suecia a integrarse al FPMR. Es detenido y, pese a varios días de "recibimiento" en la CNI, nadie más lo acompañará en su camino a la cárcel. Es uno de los jefes de la fuga de 1990, cuando decenas de presos políticos escapan por un túnel desde la Cárcel Pública, meses antes de que asuma Aylwin. Periodista en El Siglo desde hace más de 10 años, hoy es editor laboral y secretario del Sindicato.
Marco Díaz: El primero despedido. Militante comunista de muchos años, formó parte del FPMR. Hoy es dirigente del MPMR.
Iván Valdés: El segundo despedido. Joven periodista titulado de la Chile. Fue subdirector de El Siglo y luego editor de Economía. Hoy está cursando un postítulo en España.
Cristián Pavez: El tercer despedido. Militante comunista desde la dictadura. Periodista titulado en ARCIS. Editor de Movimiento Social y hombre ancla en la campaña de Tomás Hirsch. Hoy avanza su demanda en Tribunales del Trabajo, donde la empresa está declarada "en rebeldía" por que no se hizo parte.
De uno es feo hablar, además muchos de ustedes me conocen, pero quiero recordar a dos personas que han marcado mi vida. Mi abuelo, Gabriel García, que recibió su primer carnet del partido en la pampa, lejos de la oficina salitrera donde era ilegal la militancia, que en algún momento fue presidente del sindicato de la Imprenta Horizonte y pasó la dictadura entre la prisión, la tortura, un breve exilio y la lucha clandestina. El otro, mi padre, Julio Oliva Villalobos, quien asumida la decisión de entregar la vida en pos de terminar con la dictadura, murió en 1984 enfrentando a la CNI como integrante del FPMR. Con esa misma decisión he asumido la responsabilidad que mis compañeros han depositado en mi al elegirme presidente de este sindicato.
Hago este paréntesis, que creo muy necesario, para señalar que desde nuestra parte es absolutamente falso el que seamos parte de una campaña anticomunista. La verdad es que, viendo todo lo que ha pasado, sí estamos seguros de que aquí hay una campaña en contra de El Siglo y del Partido Comunista, pues no nos explicamos de otra forma la cerrazón, la soberbia y la ceguera de quienes tienen como primera responsabilidad evitar que se acentúen este tipo de conflictos y buscar una solución pronta y justa para todas las partes.
Pero aquí seguimos nosotros, en huelga, dignos y convencidos de la justeza de nuestra lucha. Confiados en que la transparencia, la consecuencia y la verdad, se abrirán paso para alcanzar una solución a este conflicto que lamentamos profundamente. Somos los primeros en querer que no se le siga haciendo daño a El Siglo y los ideales que representa. Por lo mismo, defenderemos nuestros derechos como trabajadores para seguir teniendo la confianza de miles de trabajadores que han contado con las páginas del semanario para denunciar las prácticas antisindicales, sus luchas y sus triunfos.
Estamos y estaremos, en esta o en otra trinchera profesional de combate, ayudando a construir las mayorías que Chile necesita para realizar los cambios profundos que beneficien a los trabajadores y al pueblo. El Primer Activista de la Revolución Chilena debe seguir estando a la vanguardia de las luchas y este equipo seguirá existiendo para ponerse al servicio de Chile y su pueblo".
Por el Sindicato de Trabajadores de Editorial Siglo XXI (Semanario El Siglo)
Julio Oliva García, Presidente.
Raúl Blanchet Muñoz, Secretario.
Ana Muga Sáez, Comisión Negociadora.
Jorge Texier Avellaira
Magdalena Muñoz Gutiérrez
Eliana Gómez Sáez
Jorge Zúñiga San Martín
17 de octubre 2007

11 de octubre de 2007

Los sindicalistas en Colombia sí son asesinados por rechazar el TLC

Por: Dick Emanuelsson (especial para ARGENPRESS.info)

Fecha publicación: 10/10/2007

Las FFMM asesinan a sindicalistas, dice informe de la CSI, mientras el grupúsculo sindical de Uribe en Medellín dice que no son los patronos y el Estado que matan y apoya el TLC de su presidente.

Este viernes arribará una delegación de Estados Unidos integrado por el secretario de Comercio Carlos Gutiérrez, cuatro congresistas demócratas, un republicano y un independiente. El gobierno de Uribe y el secretario de Comercio intentan, por la segunda vez en Medellín, de convencer a estos personajes norteamericanos que en Colombia no se viola a los derechos humanos y menos a los derechos sindicales (1).

Pero unos días antes de su llegada, el diario más importante en Estados Unidos, New York Times, rechaza los argumentos del gobierno de Uribe y contraataca, exigiendo que 'el presidente Alvaro Uribe y su gobierno no han hecho lo suficiente para enviar a la justicia a los matones paramilitares y a sus patrocinadores políticos, responsables de generalizadas violaciones de los derechos humanos'. Semejante declaración contrasta totalmente al discurso de Uribe en la ONU recientemente en donde afirmaba que hay 'cero paramilitarismo en Colombia', declaración en que nadie creía, ni en Colombia ni en Estados Unidos.

Pero hay más viajes de USA a Colombia. El secretario del Tesoro, Henry Paulson; el secretario de Agricultura, Mike Johanns, y el secretario para Servicios Humanos y de Salud, Mike Leavitt están preparando una delegación con al menos 50 congresistas demócratas para que puedan ver 'esa otra cara de Colombia', como dicen los organizadores de la Oficina del Representante Comercial (Ustr) y la embajada de Colombia, según el diario colombiano El Tiempo.

La idea es convencer a los congresistas norteamericanos de votar y ratificar el acuerdo de TLC entre Colombia y Estados Unidos. New York Times quiere apretar a Uribe: 'Retener la ratificación puede ser usado como un mecanismo para cambiar la conducta del señor Uribe', dice el Times en su editorial.

Sindicalistas 'amarillos'

Los congresistas demócratas han exigido, para ratificar el acuerdo de TLC, que los derechos sindicales y humanos sean respetados. Para contrarrestar o para neutralizar los argumentos del movimiento sindical colombiano, organizó Uribe el pasado 16 de septiembre en la ciudad de Medellín un encuentro entre unos congresistas demócratas y supuestos sindicalistas colombianos, un encuentro que tuvo grandes titulares en la prensa colombiana por el contenido de las declaraciones de estos 'sindicalistas'.

Decía (2) el señor Luís Germán Restrepo Maldonado, presidente del Sindicato de la Compañía de Empaques:

- En 35 años de actividad obrera no he visto que se asesine a nadie por ser sindicalista. Ni el Estado, ni los empresarios nos persiguen. Eso lo hacen grupos al margen de la ley, que incluso pelean entre ellos.

Es un argumento idéntico lo de la charla de Uribe en la UNO; En Colombia son asesinados (los sindicalistas) por la guerrilla y narcotraficantes ya que no existe paramilitares.

Las FFMM asesinan a sindicalistas

Pero 'contrariamente a lo que el Gobierno aduce, estas muertes no fueron ctimas casuales del conflicto armado interno. Sus nombres forman parte de los 2.245 trabajadores y trabajadoras asesinados en Colombia entre 1991 y 2006, de los cuales un 97 % fue asesinado por actores militares o paramilitares, con un 3% por la guerrilla u otros actores. El 22% de los asesinados eran líderes sindicales. Además de esta violencia física, existe también una campaña sistemática de los empleadores (patronos) y del Gobierno contra la libertad sindical, la negociación colectiva y esa ofensiva golpea la esencia misma del sindicalismo', fueron las palabras del Sr. Janek Kuczkiewicz cuando intervino (3) en el Parlamento de la Unión Europea el 18 de abril año en curso. El es Director del Departamento derechos humanos y sindicales, de la CSI, Confederación Sindical Internacional, con 168 millones de afiliados en todo el mundo.

En el Informe Anual 2007, que fue publicado a final del mes de septiembre, el norteamericano Guy Ryder, presidente de la CSI, dijo lo siguiente sobre el genocidio sindical en Colombia:

'Colombia sigue siendo el país más mortífero del mundo para los sindicalistas. Sin embargo, en lugar de emplear sus recursos para hacer frente al problema real, el gobierno de Uribe destina millones de dólares a sufragar una amplia campaña de relaciones públicas, y envía a altos representantes del Estado al extranjero para decir al mundo que la situación en Colombia está mejorando. No son más que mentiras. En 2006, 78 sindicalistas fueron asesinados, ocho más que en 2005, y muchos otros fueron víctimas de amenazas, secuestros o 'desapariciones' (4).'

'Guerrilleros dados de baja' eran sindicalistas

La misma CUT (Central Unitaria de Trabajadores de Colombia), representada por su presidente Carlos Rodríguez, su secretario general Boris Montes de Oca Anaya y Carlos Julio Díaz L., presidente de la Subdirectiva Antioquia de la CUT, es decir el departamento en donde los 'sindicalistas' de Uribe se encuentran, rechazan rotundamente las declaraciones de estos en un extenso comunicado el 24 de septiembre (5):

'Invitamos al señor Restrepo Maldonado y a los periodistas, no a que lean las denuncias de la CUT, sino los fallos de la justicia que recientemente condenaron a varios militares a 40 años de cárcel por el asesinato de tres dirigentes de la CUT Arauca a los que inicialmente presentaron como guerrilleros dados de baja en combate. Los invitamos a que lean el fallo de un tribunal de justicia en los EEUU que condenó a Chiquita Brand a pagar una multa de 25 millones de dólares, por financiar grupos paramilitares para asesinar sindicalistas en Urabá, los invitamos a que lean las declaraciones del paramilitar Edgar Ignacio Fierro Flores, alias 'Don Antonio' y del ex - funcionario del DAS (la policía política secreta del presidente Uribe) Rafael García, sobre un plan de exterminio a líderes sindicales orquestado por altos funcionarios del DAS y grupos paramilitares'.

El movimiento sindical colombiano ha sido terriblemente reducido por una guerra sucia sin precedentes en el mundo. Y la guerra sigue. Y uno de los motivos por matar a los sindicalistas es 'ablandar' su resistencia contra un Tratado de Libre Comercio, TLC con Estados Unidos, sencillamente por que el trabajador y el pueblo pierde, no solamente de ingresos, fuentes de trabajo sino la soberanía nacional, subrayan los altos dirigentes sindicales.

El grupúsculo sindical de Uribe

La CUT tiene 550.000 afiliados en el país de los cuales 80.000 se encuentran en Antioquia. Los sindicatos amarillos que Uribe presentó en Medellín el 16 de septiembre ante los gringos representan, según CUT, solo 0,25 % de todos los trabajadores sindicalizados en Colombia. Las tres centrales obreras existentes en el país están totalmente unidos en su rechazo al TLC, por lo cual el grupúsculo sindical de Uribe solo puede entenderse por haberse vendido a Uribe y el enemigo de clase.

Seguimos con el comunicado de la CUT:

El señor Walter Navarro, presidente de la Asociación de Profesionales de Empresas Públicas de Medellín, expresó según El Colombiano: 'Las industrias de EEUU y Colombia son complementarias, lo cual implica que el 90% de las importaciones son de bienes que no se producen en esos mercados'.

El señor Navarro está totalmente desinformado: Con el TLC las empresas de EEUU podrán vender en nuestro país más de 5.500 productos que hoy pagan impuestos de importación (aranceles) muchos de los cuales se producen (o se podrían producir) y subsisten en Colombia por esa protección. El sector manufacturero genera más de 2 millones de empleos y el sector agropecuario que se va a afectar negativamente más de 500 mil empleos.

¿El obrero colombiano por encima el gringo?

Para reforzar los argumentos vacios de Uribe, éste llevó a Medellín el señor Luís Carlos Villegas, presidente de la ANDI (As. Nacional de Empresarios de Colombia), que logró no reírse cuando sostenía ante el representante demócrata Rubén Hinojosa que El salario por hora de un trabajador colombiano, tiene mayor capacidad de compra que el de su similar norteamericano'.

Pero la CUT no falta respuesta:

'Un estudio que hizo la Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas titulado 'El poder adquisitivo del tiempo de trabajo 2006. Una comparación internacional' que se puede descargar de la página web: http://www.imfmetal.org, prueba totalmente lo contrario:

El estudio muestra que para comprar una libra de carne un trabajador de EEUU necesita trabajar 31 minutos, mientras que un colombiano necesita más de 4 horas.

Para comprar un pantalón de calidad media, un trabajador norteamericano necesita trabajar 1 hora y 39 minutos, mientras que un colombiano necesita 32 horas y 50 minutos.

Para comprar un automóvil, un trabajador norteamericano necesita laborar 918 horas y 49 minutos, un colombiano 10.261 horas y 20 minutos, etc.

Es decir, con argumentos, datos y elementos básicos, los 'sindicalistas de Uribe' en la ciudad bajo control de la mafia para-estatal, se quedan realmente cortos. Y los norteamericanos no son para nada tontos que tragan cualquier cuento.

Sigue el terror en las plantas de Coca Cola

Al contrario. Los sindicatos estadounidenses cada vez expresa más su solidaridad con la clase obrera organizada en Colombia. Como el ejemplo de United Steelworkers (USW) (sindicato de obreros siderúrgicos) - Estados Unidos - Canadá, que en un comunicado el 8 de octubre de Leo W. Gerard, presidente del USW, exige que el Uribe adopta 'todas las medidas necesarias para proteger la vida de los integrantes del SINALTRAINAL, sus dirigentes y sus familias'. SINALTRAINAL organiza los trabajadores de las plantas de embotelladoras de Coca Cola y también de Nestlé pero ha sido víctima por una persecución constante en los últimos 15 años y ha tenido que enterrar más de diez trabajadores de las plantas de Coca Cola.

Al contrario a Uribe, el sindicalista norteamericano acusa a los reagrupados paramilitares en 'Aguilas Negras' por liderar la guerra contra el sindicato y menciona el último caso con el dirigente sindical José Domingo Florez, cuyo hijo fue secuestrado y torturado por tres hombres encapuchados y fuertemente armado en la ciudad Sabanalarga.

El modelo no genera fuente de trabajo

El modelo neoliberal también ha hecho 'tierra arrasada' en Colombia en los últimos 14 años en donde NO SE HA GENERADO UN SOLO TRABAJO FORMAL/FIJO, según el Centro de Investigaciones para el Desarrollo, CID, de la Universidad Nacional, recogido en el libro Bien-Estar y Macroeconomía 2007 ( 6). Por el contrario, se ha perdido 215.000 empleos. La demanda de mano de obra en la industria ha sido reemplazada por personal temporal que desde el 1993 se ha triplicado en Colombia. Este sector informal llega a casi 64 por ciento de los empleos en donde generalmente es negado el derecho de seguridad social.

Uribe fue el Padrino de la Ley 50 y Ley 100 en la década -80, que prácticamente desarmó el trabajador colombiano, pero paralelamente le dio una tremenda arma a los patronos con derecho de despedir a sus empleados como le daba la gana.

Fue también el mismo Uribe, ahora como presidente, que propuso que los desempleados o los trabajadores que fueron colocados en la calle como consecuencia de las privatizaciones de empresas como Telecom, crearían sus propias 'empresitas', que se volvieran 'sus propios patroncitos' para así sintieran la libertad del capitalismo, y otras propuestas neoliberales, aplicadas en el mundo con resultados desastrosos.

Grandes ejércitos de vendedores ambulantes

A pesar que Colombia muestra un crecimiento económico, como por ejemplo en el 2006 en donde el PIB creció 10,8 por ciento, solo aportó el 1,9 por ciento de los puestos de trabajo ADICIONALES en la economía, sostiene Ricardo Bonilla, coautor de la investigación del CID en declaración al diario El Tiempo.

Y es una muestra muy ilustrativa de que el crecimiento económico y el aumento de la productividad no necesariamente coinciden en más empleos sino en mayores utilidades para el gran capital. Sin embargo, el trabajador ha perdido diez puntos durante este tiempo, y no solamente en poder adquisitivo sino en pago por horas extras, que Uribe quitó al trabajador colombiano, le extendió la jornada de trabajo y empeoró las vacaciones y una cantidad de otras conquistas sociales del movimiento obrero colombiano.

Lo que se ve en las calles de Bogota, Medellín o Cali son grandes ejércitos de vendedores ambulantes del sector informal, que trabajan desde tempranas horas de la mañana hasta la medianoche para poder sobrevivir.

Y con el TLC, según las centrales obreras, sería un desastre para el pais y el pueblo trabajador. Y sin duda, reforzaría la guerra.

Notas:

1) El Tiempo, 8 de octubre 2007: Indignación del Gobierno por editorial del The New York Times que pide frenar el TLC

2) El diario El Colombiano,

3) Janek Kuczkiewicz.

4) Guy Ryder, presidente de la CSI

5) Carlos Rodríguez (Presidente de la CUT) Boris Montes de Oca Anaya (secretario general) y Carlos Julio Díaz L. (presidente CUT Subdirectiva Antioquia), en un extenso comunicado el 24 de septiembre.

6) El Tiempo, octubre 3 de 2007: La industria no ha generado ni un empleo permanente en los últimos 14 años.

6 de octubre de 2007

Invitación Primer encuentro Mensual de “Pueblo en Lucha”

INVITACIÓN

ESTIMADOS COMPAÑEROS:

El próximo día sábado 13 de octubre, a las 15:00 hrs., en pasaje Ayacucho 477 (Stgo. Centro, por Monjitas entre MacIver y Miraflores, a tres cuadras de Plaza de Armas), se realizará el primer encuentro mensual de nuestro instrumento político en formación “Pueblo en Lucha”. En este encuentro deben participar todos los compañeros que impulsamos la construcción de este nuevo partido político que lucha por los derechos del pueblo y los trabajadores de Chile. Además se invita a todos las personas, dirigentes sociales y luchadores populares a que nos acompañen en esta reunión y conozcan nuestros planteamientos de lucha.

Los puntos de la tabla son:

  • Análisis de la situación social y política del país.
  • Organización de Pueblo en Lucha para las tareas de los próximos meses.

Además se informará del proceso de inscripción legal de nuestro partido, y de los contactos nacionales e internacionales que se han realizado.

El equipo de coordinación de Pueblo en Lucha, les ruega que asistan y que lleguen puntuales a esta importante reunión.

“Solo luchando conquistaremos la igualdad”

Coordinación Pueblo en Lucha

Declaración Comité de defensa de Alto Hospicio

A LA COLA DE RAMON GALLEGUILLOS

Frente a las difamaciones constantes del Alcalde de Alto Hospicio, Sr. Ramon Galleguillos, en contra del Comité de Defensa, considero sano y necesario en primer lugar, defender principios elementales de la democracia, seriamente cuestionados por las peligrosas concepciones del alcalde y segundo, responder a sus calumnias y mentiras.

“En Ato Hospicio están primero el alcalde y sus concejales; el resto, a la cola” ( declaraciones en radio Paulina fm, sábado 01 del 09)

“Si quieren venir a Alto Hospicio pédanle primero, permiso al dueño de casa”(Radio Paulina 21/8 programa Hablando en Serio)

“El Comité de Defensa no tiene derecho a hablar!!!! (La Estrella en Hospicio, 11/09)

Increible pero cierto

Las concepciones del alcalde que administra nuestra comuna, nos obligan a desempolvar principios elementales de la democracia republicana, es decir, el régimen político vigente en nuestro país, luego del gobierno de facto. Nos parece lamentable que tengamos que estar aclarando estos principios básicos de la vida publica y política. El alcalde necesita urgentemente, sacarle punta al lápiz y tomar un curso de educación cívica elemental, en vez continuar con sus reacciones histéricas y acusaciones al voleo, propias más de una mentalidad paranoica que una autoridad edilicia, que ve en toda voz distinta a la suya, una amenaza y busca por todos los medios, acallarla. Por favor alcalde, ubíquese y deje de desparramar tanta mugre al aire. Recuerde que “el odio nada engendra” (Alesandri Palma). Cualquier ciudadano u organización tiene todo el derecho a opinar, proponer y buscar soluciones a los problemas que considere; como así mimo, denunciar una política publica errada y exigir su rectificación, como lo hicimos nosotros con el famoso hospital sin camas por ejemplo, y reunirse con quien estime conveniente, del presidente para abajo, más aun cuando la autoridad local se muestra insensible al tema. No se haga la victima, diciendo que lo baypasean.

Dividir para gobernar.

El 01 del 09, en uno de los tantos arrebatos radiales del alcalde, contra el Comité, la periodista de su radio le preguntaba a que comité de defensa se refería, haciendo alusión a que en Alto Hospicio hay dos comité de defensa, dos cuerpos de bombero etc…Galleguillos no respondió la pregunta, la evadió. Yo le tengo la respuesta a la dama: existen dos bomberos, porque el alcalde dividió a bomberos y hay (nunca hubo en la realidad) dos comités porque al alcalde se le ocurrió formar un comité a su imagen y semejanza, con el único objetivo de barrer con nuestra organización. Si el señor Galleguillos, tiene una respuesta distinta, seria bueno que UD, como profesional, indagara sobre esto. Nadie puede negar que el Comité tiene algo que decir, respecto de los problemas de fondo en nuestra comuna. Personalmente pienso, que a la población le cae mal que las cosas no se digan a la cara. Invitamos al alcalde a que salga a conversar con el Comité de Defensa. ¿No seria mejor que hablara con los dirigente del comité de Defensa antes de ventilar acusaciones, en forma irresponsable?.

Mucho antes de que nuestra localidad fuera comuna. Mucho antes de que a Galleguillos se le abrieran los apetitos electorales en Alto Hospicio, nosotros ya existíamos y denunciábamos lo que hoy se esta confirmando. Cualquiera sea el juicio que se tenga sobre el Comité de Defensa, no se puede negar que nuestra organización ha sabido recoger y testimoniar el cotidiano acontecer de nuestra comuna. Acusarnos de que hacemos campaña electoral es francamente ridículo…Decimos esto, porque es tal la irracionalidad de Galleguillos, que hace dos años atrás (dos años atrás!), nos acuso (Al comité) de montar una campaña electoral adelantada. Lo paradójico es que hoy, a mas de un año de las próximas elecciones municipales, el propio Galleguillos ha comenzado una agresiva campaña electoral, a traves de la radio de su propiedad y de la que ha tomado control últimamente, nos referimos a la radio Progreso, la primer radio comunitaria que tuvo Alto Hospicio y que hoy se ha convertido en parte del aparataje electoral del alcalde.

Si para desgracia de nuestra ciudad, el señor Galleguillos resulta reelecto (cosa muy probable, como la experiencia lo indica), tendra que entender que seguiremos, con mayor fuerza, denunciando los problemas de fondo y haciendo propuestas respecto del devenir de nuestra comuna porque estamos en todo nuestro derecho. ¿Sabe realmente el alcalde lo que dice el comité?, ¿por que no le dice a la gente lo que proponemos?; o por ultimo, ¿por que no nos pregunta directamente a nosotros?, estamos dispuestos a aclararle todos y cada uno de sus resquemores y preconcepciones. Para nosotros las elecciones son solo episodios en la construcción cotidiana de nuestra historia.

Nadie sabe para quien trabaja.

Definitivamente Galleguillos, siendo alcalde de la UDI, ha sido uno de los más serviles a la concertación. El mismo se ha jactado de que cuando va a Santiago, lo reciben con abrazos. En sus ultimas declaraciones se ha definido como socio estratégico del gobierno, para despedir medicos, que según el, no se necesitan. Yo me pregunto, ¿que hubiera pasado si se hubiera hecho efectiva la municipalización del HBU?, opción tan defendida por el alcalde.

Si, según Galleguillos, el Comité de Defensa es una organización minúscula e irrelevante, ¿como puede ser que se ocupe tanto tiempo de nosotros, en sus comentarios radiales y en los propios concejos?. En ese sentido, nos molesta ser tan relevantes. No nos interesa el protagonismo. Buscamos en el fondo que las organizaciones sociales, autónomas e independientes, sean realmente los protagonistas en la construcción un nuevo y mejor futuro para Alto Hospicio como esta vertido en nuestros principios.

La persona y el personaje

cuando Galleguillos declara por ejemplo, que “para Alto Hospicio, no es prioritaria una maternidad”, ¿por quien habla?. ¿por el municipio (concejo)?, ¿es la opinión del alcalde o la de Galleguillos, como ciudadano?. Esta todo mezclado y eso no es sano. En mi opinión, el alcalde debe renunciar a su trabajo de comentarista radial, o al menos aclarar, en cada una de sus intervenciones, a nombre de quien las hace.

Alto Hospicio tiene que ser más que un sueño abortado en la moneda de Lagos. No puede en ningún caso, ser el feudo de un aprendiz de dictador. En Alto Hospicio se concentran todos los males del mundo, no es una taza de leche ni un paraíso terrenal, como pretende pintarnos el alcalde. Todos los vecinos somos concientes de aquello y estamos dispuestos a enfrentar ese desafío.

Para mi, los “enfermos de protagonismo”, son aquellos con delirios de grandeza, que no calzan con su entereza y cualidad y fracasan constantemente, cuando les toca lidiar con verdaderos problemas, porque en el fondo, no les interesan más allá. La calculadora electoral de Galleguillos, siempre prendida, no es una calculadora científica. Este señor, a mi entender, debe renovarse, en el buen sentido de la palabra. Su idea de regimiento comunal esta muy desfasada. La sociedad civil por definición, es transversal, horizontal, su concepción verticalista, plasmada en toda su analogía de “ a la cola o a la fila del alcalde y (sus) concejales” etc. etc. es aberrante e ilegal…En el diario la estrella, señalo que nuestro comité no tiene derecho a hablar!. Lo único que falta, es que se niegue ese derecho elemental! ¿Acaso pretende imponer una ley mordaza?. ¡Por favor!.

No quiero finalizar este articulo, sin hacer un llamando a todas las organizaciones y fuerzas sociales y políticas,(incluyendo la tienda de Galleguillos) y tambien a las demás autoridades que se reclaman defensoras de los derechos civiles, a manifestar su solidaridad y respaldo a nuestro Comité, frente a las mentiras y calumnias emitidas por el alcalde, a través de las cuales, además, ha plasmado toda su concepción e ideario retrogrado. Si dejamos pasar este atropello contra el Comité, estaremos colaborando con un proyecto totalitario, como el que se desprende de los hechos y dichos de nuestra máxima autoridad comunal; comprometiendo con ello, los derechos democráticos de todas las organizaciones sociales y los ciudadanos… Es lamentable que nuestra naciente comuna, sometida a tantas amenazas, tenga que cargar con una adicional, como es el cercenamiento de los derechos y las libertades civiles que tanto le costo a nuestro país recuperar.

Marcelo Soto

Dirigente del Comité de Defensa

Alto Hospicio